En estos días me tope con un “hermoso tutorial” para conseguir el amor por medio de la ley de la atracción, en el cual la técnica consistía en 3 sencillos pasos 1. Pensar o visualizar al hombre y el tipo de amor que uno desea, 2. Evitar los juicios despectivos frente a las personas que ya han alcanzado el tipo de relación que uno desea, y 3. Evitar decir frases pesimistas como “no tengo suerte en el amor” “tengo el radar dañado” “seré la loca de los gatos”. Y ya está….
Esto me puso a pensar en dos cosas, 1 como este tipo de ideas tienen jodida a nuestra generación, y 2 como sería mi hombre o amor ideal.
1° Frases
como “Deséalo tanto hasta que la vida
no tenga más remedio que dártelo”
y el alquimista de Paulo Coelho con “Cuando quieres una cosa, todo el Universo
conspira para ayudarte a conseguirla.” Nos jodieron la vida, y cuando
digo que no la jodieron es porque solo nos mostraron la mitad del camino, si, es genial desear algo, pero solo por desearlo
no se va hacer realidad, hay que construirlo, hay que hacer cosas para
que ese deseo se cumpla o por lo menos
tengamos una aproximación a lo que deseamos; un
ejemplo claro es cuando nos preguntan “¿cómo
es el hombre de tus sueños'” o “¿como te
imaginas al amor de tu vida'”
Uno responde
algo más o menos así
- Quiero un hombre que le guste leer, que haga ejercicio, aventurero, que le fascine viajar, que hable otro idioma, que sea un buen amante, que sepa cocinar, que toque algún instrumento, que no tema expresar sus emociones…. (Blah, Blah, Blah).
Y va uno a ver y resulta que el último libro que uno
se leyó fue juventud en éxtasis, el
mayor número de abdominales que uno se hace son 5 y es intentado levantarse de la
cama un domingo a las 3 de la tarde para
abrirle al del domicilio, la mayor aventura es tratar de subirse a un Transmilenio
en hora pico, uno nunca ha viajado solo y ni pasaporte tiene, canta en ingles y termina invocando a Satanás,
le mencionan sexo oral y uno cree que es hablar de sexo, las sopas instantáneas son el plato estrella y cuando quiero enamorar le
pone atún, la mayor aproximación
musical es tocar la pandereta o maraca
en la novena con las tías, y a uno no se le escapa un te quiero ni por equivocación
…..
Con esto no quiero decir que los polos opuestos no
se atraigan, si claro, pueden ser un volcán en erupción, pero va a ser una cosa
momentánea, en donde construir algo es muy difícil, eso sí, no imposible y si
usted lo ha logrado, me le quito el sombrero y
hasta le envidio, hay cosas que son negociables y sacrificables, pero
otras que No, por lo cual es muy complejo edificar una relación estable y
duradera.
Es que
muchas veces, lo que uno busca por fuera
o en alguien más, es lo que le a
uno le hace falta, otra gran mentira que
nos metieron, el buscar mitades para complementarnos, que bonito sería romper eso, salir de esa
zona de confort y empezar a construirnos a nosotros mismo, y no esperar a que llegue un héroe salvador que nos motive a realizar ese tipo de cosas,
si, es deli vivirlas con alguien y
formar un “team adventure”(ojo a mi ingles)…. Pero… y
si no llega, o si llega y resulta que uno no tiene algo interesante que
ofrecer, o que el único plus que se tiene es una cara bonita, un culo y unas tetas grandes, o solo un cerebro follable pero eso del auto cuidado no va con uno, o peor aun
ni cerebro ni cuerpo, pues jodidos….
Creo que es más factible que en el proceso de
construcción encontremos a alguien con ese tipo de similitudes o de diferencias
que nos enseñen a ver el mundo de otra
forma, pero es que por más que lo
queramos, si no movemos ni un ápice por nosotros mismos, no va a pasar nada, y
vamos a seguir frustrados y estancados deseando un imaginario inalcanzable….
Así que la invitación hoy es a movernos, a arriesgarnos
y
sé que no es fácil, todos en algún momento nos hemos sentido estancados, pero eso también es parte
necesaria de la vida, para reinventarnos
y brillar cada día con más luz…
Ahora lo prometido es deuda, como es el hombre de mis sueños:
Que me muestre autores nuevos, sería estupendo que le guste Star Wars o que sea fan de otra saga y podamos
intercambiar conocimientos, que le
gusten los gatos, que no le fastidien las demostraciones de afecto cursis que suelo hacer, ideal que tenga barba o
bigote, que tenga la capacidad de
tocarme solo con palabras, y que al mismo tiempo haga del silencio un lugar cómodo, alguien
que si se aburrió de mi cara de idiota enamorada, de mis chistes sin gracia y
de mi forma de roncar, sea capaz de
decirlo o decirme en que carajos falle y no la excusa de siempre “Es que tengo
mucho trabajo”. En definitiva alguien
que no tenga miedo, que no tenga el
miedo que tengo yo, cada vez que me topo
con un cerebro que invita a bailar al mío, alguien que me acepte, tal y como yo he
empezado a aceptar que me gusta que me lean poesía y me arrunchen en
cucharita en las noches frías….
Dulces y pervertidos sueños
Con Amor ratona