domingo, 14 de julio de 2019

Mi experiencia en pole dance.

 “Yo que ni el  pasamanos he podido cruzar una sola vez completo
Me inscribí a clases de pole dance”…  

Todo inicio por una mujer maravillosa a la que hoy tengo la fortuna de llamar amiga, con la que el universo en su infinita sabiduría me topo y es que aburridas de solo comer y dormir los fines de semana buscamos una actividad para realizar y la verdad  no tengo  idea en que estábamos pensando cuando tomamos esta decisión,  pero las clases de Twerk   o el tiembla nalgas como le decimos,   combinadas con  pole dance nos parecieron la opción más adecuada.

 Después de una larga búsqueda en Internet  fuimos a visitar la academia, la cual es una casita súper coqueta en chapinero, eso sí  dimos 80.000 vueltas antes de encontrarla, pero en el momento que entramos sabíamos que queríamos estar ahí; el  piso de madera, los espejos gigantes, los tubos dorados, las telas rosadas y unas alas multicolor dibujadas en la pared, fueron   el escenario perfecto para dejar los miedos y prejuicios  atrás;  aunque creo que lo que más nos motivo fue  ver un pedacito de la clase que se estaba dando en  ese momento;  un hombre alado  sobre  unos tacones negros  brillante  de casi 22 centímetros, liderando los movimientos enérgicos de  7 u 8 pole dancer al ritmo de rompe de Daddy Yankee,  donde  literalmente estaban  rompiéndola, nos dio el empujón final para meternos de cabeza en esta aventura.

 Iniciamos con clases de Twerk, tras una hora de  "un, dos, tres, cua... cha cha chahcha" y  sudar como caballo en feria de pueblo, descubrí partes de mi cuerpo que ni sabía que existían y    cuando digo descubrí es por el dolor que me quedo, pero fue fantástico, así no dé pie con bola con la coreografía, confunda izquierda con derecha y diga jamás  voy a mover las nalgas  de esa manera, la clase me pareció deliciosa.
  
Seguimos con las clases de pole y sexy pole, (ambas con el profesor alado de la primera visita)  yo, en mi ignorancia pensaba que todo era lo mismo y pues no, la clase de pole dance fue durísima es más,  llevo como 6 clases y  aun no logro sostenerme en el tubo y ni pensar en hacer figuras, pero  así me demore 10, 15 o 20 clases para subirme al tubo con estilo y elegancia lo voy hacer; lo más bonito es vencer los miedos, el sentir la fuerza interna que  tienes te hace pensar si puedes sostener tu propio peso puedes con todo, eso si se necesita disciplina, constancia y mucha tolerancia a la frustración;  seguimos con la  clase de sexy pole  la cual se tiene como reto seguir una coreografía en tacones,  rodilleras sacando  toda la sensualidad  que llevamos dentro, la primera clase no se me va a olvidar jamás, fue el 4 de mayo (el día de star wars) y la banda sonora de esa clase fue “Tainted love de Marilyn Manson",  así después de terminadas las dos horas de entrenamiento,  salimos con el cuerpo mal trecho, uno que otro morado (aunque acepto que para mí son como medallas de honor ) el alma llenita de júbilo  y la sonrisa de oreja a oreja, supongo que así se sentían los hombres después de una batalla cuerpo a cuerpo.

A medida que vamos avanzando las clases se tornan más fáciles, el disfrute es mayor y ver al hombre alado en el tubo es algo que te impulsa a seguir cada día, su calidez, sus chistes  la corporeidad y sensualidad que tiene es increíble, la forma de transmitir emociones con el cuerpo, y es que verlo sobre sus tacones, hacer mil combos en el tubo, es mágico, en momentos parece irreal, lo más lindo no solo es que  te hace creer que también puedes volar, ¡ el te enseña a volar !……. y aunque los profes de la academia son divinos todos, yo le tengo un cariño especial al hombre alado, por eso tanto derroche de amorsht.....

Hay una cosa que es  necesaria resaltar, el cuento no es solo el reto personal, lo  interesante de la experiencia,  es la creación de vínculos y la interacción con otras chicas, aunque el mito urbano es que entre mujeres nos hacemos el feo, aquí pasa todo lo contrario, las más avanzadas nos muestran y explican con cariño los movimientos, corremos a sostener a la que esta tambaleándose en el tubo, aplaudimos y celebramos la figura de la otra, aquí no hay comparaciones o comentarios feos sobre como se ve, si se le  marca o   que se le marca, no, acá nos apoyamos entre todas, somos unas amazonas  buscando, desarrollando y sacando toda nuestra fuerza interior...... 

 Me despido con el que creo es el mejor aprendizaje de esta experiencia y es que así este uno a punto de caerse, ya no sienta los brazos y las piernas tiemblen, siempre hay que “Respirar, Sonreír, y estar en puntas de pies” gracias a @andruriveraexotic (el hombre alado) y  gracias  @PoleDanceBogotá por ayudarnos a construir el sueño de volar.


Dulces y pervertidos sueños
Con Amor,  Ratona.